El trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad se corresponde, según el DSM-5-TR, por un patrón conductual caracterizado por dificultades en la atención pudiendo observarse hiperactividad e impulsividad, interfiriendo en el correcto desarrollo del individuo (American Psychiatric Association, 2024).
Por consiguiente sus criterios diagnósticos son (Íbidem):
- En caso de existir un patrón de inatención, el individuo debe presentar, mínimo, 6 de los siguientes síntomas durante un periodo igual o superior a 6 meses dificultando sus actividades sociales y académica o laborales:
- Dificultades para prestar atención a los detalles o comete fallos a causa de su descuido.
- Produce la sensación de no escuchar cuando se le habla directamente.
- Dificultad en la organización de tareas, así como actividades.
- Prefiere evitar aquellas tareas que requieran un esfuerzo mental sostenido.
- Facilidad para perder cosas.
- Muestra facilidad para distraerse con estímulos externos.
- Se descuida en las tareas diarias.
- En caso de existir un patrón de hiperactividad e impulsividad, el individuo debe presentar, mínimo, 6 de los siguientes síntomas durante un periodo igual o superior a 6 meses:
- Movimiento excesivo de manos y pies o del cuerpo estando sentado.
- Se levanta cuando debe permanecer sentado.
- Corre o salta cuando no debe hacerlo (en adultos: se muestra inquieto)
- Se muestra incapaz de jugar o participar con tranquilidad en actividades de ocio.
- Habla en exceso.
- Responde a las preguntas antes de que acaben.
- Dificultad para esperar su turno.
- Interrumpe en conversaciones o juegos.
Otros criterios nos indican que:
- Se debe comenzar a presentar los síntomas antes de los 12 años.
- Deben observarse los síntomas en dos o más contextos.
- Se observa una evidencia clara de que los síntomas interfieren en su contexto social y académico o laboral.
- Criterio de exclusión: sus síntomas no se explican mejor por la presencia de otro trastorno mental (ansiedad, trastorno disociativo, etc.).
Por otro lado, se pueden dar tres tipos de presentaciones (Íbidem):
- Predominantemente inatento.
- Predominantemente hiperactivo-impulsivo.
- Combinada.
Según sus grados de gravedad, nos podemos encontrar con:
- Leve: pocos síntomas con poco deterioro.
- Moderado: punto intermedio entre los otros dos niveles.
- Grave: muchos síntomas o muy severos con un deterioro importante.
Referencias bibliográficas:American Psychiatric Association. (2024). Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. Texto Revisado (DSM-5-TR), 5ª Edición. Editorial Médica Panamericana.